Uno de los grandes problemas que tuvo el tercer Reich, fueron los cambios de decisiones de su máximo dirigente, Adolf Hitler. De no haber sido por ello y haber tenido en cuenta que el desarrollo de la industria de guerra era fundamental, muy posiblemente habrían ganado la guerra. Un ejemplo fue la formación del JV44, por parte de Adolf Galland, desoyendo las órdenes.
EL MISTERIO DEL CIRCO DE GALLAND | EL EV3NTO 02×30
Sintonía: Traitors Thieves Bastards – A Ritual Play
Prólogo al programa «EL MISTERIO DEL CIRCO DE GALLAND | EL EV3NTO 02×30«
De todos es ampliamente conocido la condición mental de Adolf Hitler, ya no solo por sus disparatadas creencias en lo sobrenatural, o su aversión por la raza judía que le llevó a crímenes de guerra reprobables, sino a sus erráticas decisiones según con el pié con el que ese día se levantara.
Esas erráticas decisiones, le llevó a precipitarse en muchas de sus decisiones o en mover de un lado a otro las órdenes, provocando el desconcierto de los mandos y las tropas. Llegó un momento en que la sensación en los diferentes ejércitos era que los soldados simplemente eran peones prescindibles y totalmente deshumanizados. Esto era aún más palpable en las fuerzas aéreas, la Luftwaffe. Allí los pilotos se mantenían en servicio desde que entraban hasta el final – final de la guerra o final de sus días – con lo que sobrevivir era algo que sólo unos pocos lo conseguían.
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